EN ESPAÑA MANDO YO

                                   EN ESPAÑA MANDO YO

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Me vi en aquel aquelarre desprovisto de mi pócima inherente a los males y supersticiones. Aparentemente todos los que atestaban la reunión eran normales. Pero no era así. Debajo de sus casacas pude observar los maleficios en forma de abalorios que pronto reconocí.

Soy un experto en brujerías y no me extrañó que de esa reunión no salieran cosas buenas. Observé a mí alrededor y vi la podredumbre de los que allí estaban. Mucho traje y mucha corbata, pero bajo esos atalajes con buena apariencia había  unos corrompidos corazones.    

Sólo había murmullo sin saber lo que avecinaba que se suponía sería malo. En el fragor de tan entusiasmo proceder, apareció el que se esperaba semejando un leopardo y su preciosa piel. Los agoreros temblaron. Los brujos de baja estirpe enmudecieron prestando la máxima atención a su discurso.

Este no se anduvo por las ramas y abriendo las fauces con la que se arropaba imploró al averno para que con su maldición hiciese el mundo a su antojo. No todos estuvieron de acuerdo, hubo discrepancias de su presunción, (equivocada pienso yo). Establecía su mandato en todo el globo terráqueo. Discriminando al pobre, al virtuoso, al bondadoso... Y como un rayo celeste que cayese del cielo los maleficios se volvieron contra él y desapareció en una nube de fuego. Se vio en la cúspide una nube blanca que entre música de violines se elevó hasta el cielo.

En ese momento desperté, sudoroso maldiciendo aquella pesadilla que para mí me era infiel a mis principios pero que los sueños no mandas tú en ellos.

Con mal sabor de boca me levanté y encendí la televisión y, ¿qué les parece que vi? al Presidente ZAPATERO  dando un mitin en estadio del Bernabeu diciendo entusiasmado.

EN  ESPAÑA MANDO YO.

                         JUMECO

Aquelarre: Reunión nocturna de brujos y brujas con la intervención del demonio en figura de macho cabrío